jueves, 17 de septiembre de 2009

Agua llovida para cosechas del verano

Johnny Núñez Zúñiga

Periodista-UNA.

Cultivar durante los sofocantes veranos en Guanacaste ya no será la excepción. Un proyecto del Centro Mesoamericano de Desarrollo Sostenible del Trópico Seco de la Universidad Nacional (CEMEDE-UNA), busca que mediante la creación de reservorios de agua llovida los agricultores guanacastecos puedan garantizar la producción de sus granos básicos durante la época seca como una alternativa para contribuir en la seguridad alimentaria.

Esto será factible gracias al proyecto que impulsa el académico del CEMEDE y el campus Nicoya de la UNA, Henry Toruño, denominado: Fortalecimiento de la seguridad alimentaria mediante el desarrollo y fomento de reservorios artificiales de aguas precipitadas, para la utilización en la agricultura sostenible, en la región Chorotega de Costa Rica.

Según Toruño con esta iniciativa se busca sistematizar las experiencias existentes en el país sobre el tema de reservorios de agua precipitada para fines agrícolas; adicionalmente se realizará un análisis bibliográfico de experiencias exitosas en otras latitudes, se desarrollará un seminario con expertos nacionales e internacionales para discutir esta actividad y se definirá el diseño teórico de un sistema que pueda ser empleado en la región del Pacífico seco, el cual tome en cuenta la realidad de los productores agrícolas.

Definirán modelo

Posteriormente, se pondrá en marcha en algunas fincas modelos el diseño de reservorio definido en la primera etapa. Mientras que en la segunda etapa, se prevé realizar un análisis de factibilidad de la implementación de estos reservorios en la región.

La zona de estudio comprende los cantones de Nicoya y Santa Cruz. En estos sitios se ubicarán fincas con condiciones requeridas por el proyecto, a fin de desarrollar un proceso de capacitación a pequeños productores agropecuarios, de manera que se incorpore tanto al grupo familiar, como a personal de trabajo de la finca, quienes son miembros de la comunidad. Entre ellos, productores emprendedores de los cantones de Nicoya y Santa Cruz, instituciones públicas del sector agrícola y asociaciones de productores de la región.

Toruño agregó que se desea orientar al campesino para que retome la actividad productiva, motivando al pequeño y mediano productor sobre la existencia de sistemas eficientes y prácticos para que lleve a su hogar granos y hortalizas cultivadas por él en época seca y a la vez tenga la posibilidad de comercializar el excedente.

El académico del CEMEDE-UNA detalló que se realizó un encuentro con los productores, a fin de definir un modelo de reservorio para elaborarlo en la zona. “Podemos diseñar reservorios por medio de geomembranas, arcillas pesadas y plásticos.